Josep Roca, el mejor sumiller del mundo, visitó Colombia esta semana para participar en «Un Matrimonio Perfecto«, una cena ofrecida por BBVA y la Embajada de España en el marco del Foco Cultura Colombia-España. Una iniciativa que permite visibilizar a los líderes culturales de ambos países.
“La idea de Un Matrimonio Perfecto se refiere a dos culturas, la colombiana y la española, que no son excluyentes y que al contrario se hermanan con sabores que se pueden complementar y que muestran que detrás de esas alianzas, existe el valor de la amistad ya que nos presenta a todos como embajadores de nuestra gastronomía”, dijo Josep Roca, el summiller del Celler de Can Roca, elegido como el Mejor Restaurante del Mundo en 2013 y 2015.
El prestigioso “camarero de vinos”, como le gusta que lo llamen, dijo esto en el marco de una cena ofrecida por BBVA y la Embajada de España en Colombia que con el título de Un matrimonio perfecto, mostró ante un selecto grupo de comensales los maridajes entre los vinos españoles y los sabores de la cocina colombiana, en la que lo acompañaron los chefs Harry Sasson, Jorge Rausch y Álvaro Clavijo.
Teniendo a Josep Roca dirigiendo la experiencia en vinos, los asistentes recorrieron con su paladar desde las arepas orejas de perro elaboradas por Harry Sasson, acompañdas con un vino espumoso De Nit Raventos i Blanc, hasta la cuajada con melado de guayaba de Jorge Rausch, acompañada de un vino Apóstoles Palo Cortado Vors González Byass D.O. Jerez.
Para Roca, uno de los mejores platos colombianos para maridar es la arepa con queso: “este plato con un vino espumoso larga crianza, puede ser una armonía para el paladar. Por ejemplo, un cava gramona tres lustros seguramente funciona de maravilla, ya que tiene cremosidad y aromas tostados, además el carbónico del espumoso le aporta frescura al paladar, haciendo una mezcla que funciona a la perfección”.
Refiriéndose a los platos más difíciles a la hora de maridar señaló al sancocho. “El sancocho no tiene maridaje porque ya con sus propios jugos se marida solo. Así mismo, aquellas frutas que son ácidas o especias picantes, también son complejos de maridar”, asegura Roca.
Siendo esta su cuarta vez en el país, Josep Roca mostró su entusiasmo: “en Colombia hay una gran diversidad de frutas, especias y culturas que uno nunca termina de conocer. El respeto y trabajo conjunto entre las culturas y la gastronomía de raíz y de vanguardia le han permitido al país destacarse por tanta variedad en el exterior”.
“La gastronomía colombiana equivale a destapar un regalo, siempre te sorprende con nuevos sabores y texturas. Por eso la mejor forma de cuidar nuestra despensa colombiana, es apoyando a los proveedores pequeños que respetan su tradición y cuidados para ofrecer productos de alta calidad” comentó Harry Sasson, chef anfitrión de la velada.
El Embajador de España en Colombia, Pablo Gómez de Olea Bustinza, asegura que «la gastronomía es una manifestación cultural que tiene un potencial enorme para unir. Un matrimonio perfecto define muy bien el objeto de esta actividad, que no es otro que demostrar la íntima cercanía que existe entre nuestras dos gastronomías y como consecuencia, de la similitud entre formas de combinar ingredientes, gustos y por ende, de ver la vida. El intercambio entre ambas además aporta nuevas ideas y nuevo enfoques a nuestra forma de cocinar. En definitiva, una unión muy beneficiosa que nos enriquece mutuamente«.
Por su parte, Álvaro Clavijo, chef de El Chato y quien participó en la cena aportando el segundo plato, rábanos, pescado curado, yogurt de cabra y leche en polvo, dijo que “en la gastronomía colombiana hay mucho por descubrir e innovar. Me gusta reinventar lo tradicional”.
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